Desayunos
Desayunar temprano, fuera de casa, es un placer inédito y gratificante. Hace años que lo practico. Rodeado de gente tranquila en su camino al trabajo, des-ayunando, leyendo las noticias, disfrutando de ese momento de introspección tempranera. Son muchos los lugares y ambientes que he conocido, desde mercados en Pensilvania a saborear donuts recién hechos en un café del metro de Philladelphia, a cafetines en Madrid, Barcelona, Cádiz, Tánger….
En Villanova y la Geltru se desayunaba con cava (gran idea de los catalanes), sobrasada en Mallorca. Camareros que ya te conocen y no hay ni que pedir, simplemente te sirven evitando romper ese no-hablar mañanero.
Algunos toman su copa de brandy o chinchón con el café, o churros, o avena o tostada con aceite y tomate o pringá roja.
Es un momento especial de reflexión de cómo va a ser el día y de como va la vida.